Años de innovación BIONIC
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En 2006, en un garaje de San Diego, California, BIONIC empezó con una idea sencilla que desde entonces se ha convertido en un compromiso sincero con los perros y sus humanos: proporcionar una durabilidad sin igual que haga que las colas de perros de todo el mundo sigan moviéndose felizmente.
La geometría defensiva patentada de BIONIC proporciona resistencia y longevidad con diseños propios. BIONIC está diseñado para redirigir y dispersar la fuerza de la mordida de tu perro.
Innovación BIONIC
#Frikisdelosperros
Las moléculas de la GOMA BIONIC se entrecruzan creando nanoconexiones de material que son BIONIC en resistencia, pero a su vez flexibles y elásticas.
Desarrollo del material
La Goma BIONIC se desarrolló en un laboratorio de EE.UU. que también diseña polímeros de misión crítica para aplicaciones militares y aeroespaciales.
Ingredientes
La GOMA BIONIC está fabricada con ingredientes de alta calidad aptos para uso alimentario según la FDA, naturalmente libres de cosas que no quieres que tu perro se lleve a la boca.
Ingeniería
BIONIC está diseñado y fabricado mediante un proceso patentado, desarrollado para satisfacer el juego de perros con muchísima energía y el uso riguroso de tu perro.
Control de calidad
BIONIC pasa por múltiples controles de calidad para garantizar que cada producto BIONIC cumple nuestros elevados estándares.
Pruebas de laboratorio
El Programa de Investigación, Desarrollo y Pruebas de BIONIC incluye pruebas ASTM en laboratorios acreditados de EE.UU. La seguridad y el bienestar de tu perro son nuestra máxima prioridad.
Sin atajos ni parches
¿Ftalatos? Nunca.
Algunos utilizan ftalatos para que los productos para perros sean más duraderos… se ha demostrado que estas sustancias químicas dañan el hígado, los riñones, los pulmones y el sistema reproductor.
¿Plomo? ¿En serio?
Algunos utilizan el plomo para hacer más flexibles los productos para perros, de modo que “reboten más” y “mantengan su forma”. El plomo no es aceptable en los productos para perros. Jamás.
¿BPA? De eso nada.
El bisfenol A (BPA) utilizado en algunos plásticos es un disruptor endocrino. La Agencia de Protección del Medio Ambiente (EPA) señala que el BPA puede interferir con las hormonas naturales.
